El Real Madrid le aguanta el pulso a la Real Sociedad y logró ponerse líder de nuevo a la espera del partido del conjunto vasco. Ancelotti hizo rotaciones y sorprendió con Mariano y con Marcelo en el once titular. La jugada no le salió mal al técnico italiano, aunque el Madrid acabó suifriendo ante el equipo de Escribá.

No llegó a ser una pesadilla, pues el Madrid supo dominar en ciertas fases del partido, si bien nunca terminó de dominar y dejó un encuentro abierto e igualado hasta el final. Honores a un Elche que se llevó otra derrota y que mereció algo más que la enhorabuena por el esfuerzo.

Las estadísticas no fueron tan dispares y eso se reflejó en el luminoso. Rodrygo fue el primero en avisar con un fuerte disparo desde la frontal que repelió Kiko Casilla. El Elche respondió con varios coletazos, pero le costaba el último pase.

El propio Rodrygo tuvo que marcharse por unas molestias en los isquios y en su lugar entro Marco Asensio en lo que fue un cambio obligado para el Madrid. Courtois evitó lo que pudo ser un cambio de guion. El belga metió una mano de hierro para despejar un remate a bocajarro de Fidel. Poco después llegó el primer golpe del Madrid.

Perdió el balón el Elche en el medio, el balón le llegó a Mariano, que prolongó de tacón para Vinicius y el brasileño, ya en el área, no perdonó con un disparo cruzado, abajo y con la izquierda. Perfecta definición para un brasileño que, a golpe de goles, sigue olvidando las críticas por su falta de puntería.

Mariano intentó tener su parte de protagonismo. Calidad no le falta, pero sí sitio. El delantero hizo la mejor jugada al tumbar a Kiko Casilla con un amago espectular y no pudo redondearla porque se quedó sin ángulo.

Tan igualado llegó el encuentro al descanso que Lucas Pérez, que no vio solo a Fidel, golpeó el cuero con la pata de palo y se fue llorando por línea de fondo. Mas contundencia le faltó al conjunto ilicitano, mientras que al Madrid se le vio bien en líneas generales y con una idea clara que plasmar sobre el césped.

Vinicius sigue a lo suyo

Entre Fidel, Boyé y Lucas Pérez intentaron amargar al Madrid . Al primero le tocó avisar en el inicio de la segunda Fidel, en la que el Elche quiso comerse durante unos minutos a un Madrid que logró aguantar.

Militao estuvo excepcional en la concentración. Frenó a Boyé y tocó lo justo para evitar un remate de Lucas Pérez solo. Apretaba el Elche cuando Raúl Guti hizo una entrada abajo a Kroos con la que vio la segunda amarilla y, por tanto, la roja. El jugador quiso comerse al alemán porque no lo vio para tanto.

Pareció un partido acabado con la inferioridad numérica del Elche y, lejos de la realidad, no fue así. Vinicius, que ya no necesita ni milagros ni trucos, recibió un pase en el área de Kroos, controló orientado y metió la bota antes de que llegara Kiko Casilla para picarle el cuero con una calidad pasmosa. Cosas que no se veían hace unos meses.

Escribá metió toda la pólvora y Ancelotti siguió con sus rotaciones. Casemiro tuvo un error que manchó lo que pudo ser un marcador impoluto. Se quedó corto en un pase en largo y Pere Milla se fue solo hacia Courtois, al que batió con un disparo abajo y a un lado. En el arreón final, el Elche no pudo conseguir el milagro y el Madrid se metió los tres puntos en el bolsillo en el que acabó siendo un partido interesante y lleno de trabajo.