Parece que el sprint final del West Brom no será suficiente para lograr salvar la categoría. Los de Sam Allardyce firmaron un mes de abril notable, sacando siete puntos de 12 posibles, pero quizá ya era demasiado tarde.

Una victoria ante los Wolves en la trigesimocuarta jornada de la Premier League habría dado esperanzas de obrar la machada en las últimas cuatro fechas, pero el empate final les condena a un descenso prácticamente asegurado.

Enfrente, un conjunto, el de Nuno Espirito Santo, que ya se juega poco más que el honor de quedar en la mejor posición posible. Pese a ello, los Rúben Neves, Traoré, Semedo y compañía rascaron un punto de The Hawtorns.

La primera parte fue algo tosca, con imprecisiones por parte de ambos conjuntos y poca claridad en las jugadas ofensivas. No obstante, todo esto cambiaría cuando el árbitro estaba a punto de señalar el descanso. En ese momento, Fábio Silva consiguió el 0-1 gracias a un disparo que golpeó previamente en Bartley, imposibilitando a Johnstone llegar.

Los locales, lejos de amedrentarse, salieron en la segunda mitad con la intención de darle la vuelta al luminoso. En esta línea, Diagne logró el tanto de la igualada a los 17 minutos de la reanudación tras un potente cabezazo. Por delante, media hora para conseguir la necesaria victoria.

No obstante, pese a seguir intentándolo, con más corazón que cabeza en muchas ocasiones, el gol de la remontada nunca llegó a materializarse. Con este resultado, los ‘baggies’ se quedan anclados en la penúltima posición con 26 puntos, diez menos que el Newcastle, equipo que marca la salvación; mientras, el Wolverhampton es 12º con 42 puntos.