La Selección de Paraguay logró alzarse con la segunda posición del Grupo A y tendrá una oportunidad de oro en la última jornada para terminar la primera fase de la Copa América con la primera plaza. Enfrente, Chile finalizó su participación en este período con una decepcionante derrota.

Lo cierto es que la primera media hora de encuentro resultó soporífera,  aunquepoco tuvo que ver con el devenir final. Apenas unas pocas internadas de los jugadores ‘albirrojos’, sobre todo en botas de Braian Samudio, que comenzó el partido realmente activo.

Toda esta pasividad y poco ‘punch‘ cambió radicalmente a partir del primer gol del encuentro. Cuando hasta las butacas vacías del estadio Mané Garrincha comenzaban a bostezar, el propio Samudio decidió darle una vuelta de tuerca a la situación.

Miguel Almirón, del que luego hablaremos, puso un centro medido al segundo palo desde el córner derecho. El futbolista de Toluca llegó con poderío para cabecear al fondo de las mallas el 0-1. A partir de este minuto 34, la hoja de ruta del partido cambió radicalmente.

Monopolio ‘albirrojo’

Todo lo vivido hasta entonces sobre el terreno de juego dejó de valer. La diana, lejos de servir para espolear a la ‘Roja’ lo que hizo fue hundirla todavía más en su mar de dudas e incertidumbres.

Carlos González pudo anotar el segundo tanto de la noche pocos minutos después en una jugada prácticamente idéntica, con la inestimable ayuda de Claudio Bravo, que erró incomprensiblemente en la salida. Sin embargo, su remate terminó yéndose fuera.

El cuadro de Martín Lasarte salió del vestuario con algo más de mordiente, intentando hilvanar alguna jugada que le permitiese soñar con el empate, o incluso la victoria. Pero todo fue un espejismo. Un cabezazo de Arturo Vidal en el 52′ sin apenas peligro, y poco más.

Miguel Almirón, dueño total

Tan solo tres minutos más tarde llegó la sentencia definitiva para los de Eduardo Berizzo. Gary Medel cometió un incomprensible penalti sobre Carlos González, tras darle hasta en el carnet de identidad.

Esta acción fue aprovechada por Miguel Almirón para poner el 0-2 que, a la postre, acabó resultando definitivo. No obstante, para el habilidoso futbolista del Newcastle, el ‘show‘ no había hecho más que comenzar.

El ’10’, que ya estaba cuajando una buena actuación, se puso el sombrero y la capa, comenzando así a sacar su faceta de mago. Cada vez que tocaba el balón, se respiraba en el ambiente que algo podía pasar, mientras que sus rivales se mostraban incapaces de adivinarle las intenciones.

El choque no estuvo exento de polémica, como no podía ser de otra forma dados los nombres de ciertos protagonistas. Corría el 74′ cuando el árbitro Wilmar Roldán fue al VAR para revisar un posible penalti favorable a Chile. Sin embargo, tras el chequeo, tomó la decisión de no señalar la pena máxima, algo que enfureció especialmente a Arturo Vidal.

A partir de aquí ya pocas cosas (o ninguna) sucedieron y el 0-2 campeó en el luminoso hasta el minuto 100, en el que se señaló el pitido final. Tremenda victoria para Paraguay, que se asegura, como mínimo la tercera plaza y podría incluso terminar como líder del grupo. Por su parte, Chile dependerá de que no gane Uruguay en la última jornada para evitar la cuarta posición, y, con ello, enfrentarse a Brasil en cuartos de final.